Un abrazo sincero (a Leticia)

Quisiera ser ese abrazo
por el que lloran niños huérfanos
cuando por las noches miran el cielo
y cuentan los días en su encierro.

Quisiera ser la hoja de otoño
bajo la que se esconden los polluelos
cuando quedan a merced de los cuervos.

Quisiera ser el arcoiris
que cruza ante mis ojos abiertos
cuando las nubes con su lluvia se alejan
y nos saca de nuestro desconcierto.

Quisiera ser el néctar
que liban las abejas en mi huerto,
el polen que desnudan con sus patas
dejando una huella indeleble y luego alzan vuelo.

Quisiera ser tantas cosas:
el agua que brota en el oasis
cuando te encuentres en un lugar desierto.

Quisiera ser la luz que te alumbra
cuando estés por las noches en tu lecho,
leyendo un libro que quede sobre tu pecho
con la página marcada cuando te invada el sueño.

Quisiera ser ese abrazo,
el que un día, no ha mucho tiempo,
nos dimos ambos, en el aeropuerto
cuando nos conocimos, en Ciudad de México.

Quisiera ser ese abrazo,
el que nos dimos con nuestro amigo,
el que compone tan bellos versos,
que pese a la distancia, sé que está atento.

Quisiera ser ese abrazo sincero...