Ellos solo necesitaban amor (a Leticia)

Ella era un cisne entre narvales,
como una princesa entre hadas,
era el sabor a lima y melaza,
con tanta fuerza como Heracles.

Ella sabía de su potencial:
conocía de música y arte,
viviría en cualquier parte
con tal de encontrar su grial.

Él era como el mismo Marte:
tejía la paz con sus armas,
podía amar con toda su alma
y luchar como no lo hace nadie.

Él no tenía en su haber enemigos,
no comulgaba con ningún mortal
ni era partidario de la falsa moral,
ni siquiera iba a misa los domingos.

No se conocieron en una red social,
ella buscaba consuelo para su soledad,
él una vasija donde su dolor escanciar
y encontrar su lugar en la sociedad.

Juntos compusieron una melodía,
rieron y hablaron por noches y días,
también sufrieron por la lejanía,
en sus cartas reflejaban melancolía.

Hilvanaron versos como brocados
hablaron de mitos y leyendas,
religión, política y ciencias,
hubo quien los creyó alocados.

Unieron sus vidas como humanos,
bebieron en sus pieles el cáliz sagrado,
vivieron por siempre enamorados
y su historia fue un sueño dorado.

Ellos solo necesitaban amor...